En el tramo de bajada el personal ha podido escoger entre ir por el camino de pista (muy divertido y ciclabe) o bien por las trialeras que cruzan dicho camino de pista, nada complicadas aunque nunca tiene uno que "relajarse", de hecho ha habido una aparatosa caída de un biker que parece ser se ha resentido bastante, sin embargo no le ha impedido seguir y acabar el pequeño tramo que le quedaba hasta llegar al punto de merienda. En la merienda, mucha cháchara animada (no podía ser menos tras disfrutar de esta divertida y cómoda KDD), fotos de grupos y de familia y lanzamiento de obsequios por parte de los "Maifren" al resto del personal, contribuyendo a cerrar el círculo perfecto de la jornada para aquéllos que han sabido saltar más. Una vez de regreso en Binissalem, mientras nos tomábamos una cervecita rápida, hemos repasado los momentos más buenos de la KDD y no hemos ido tras despedirnos de todos los Maifren quienes celebraban el éxito de su 2ª KDD, satisfechos por su buen trabajo de organización.
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